Y los pumares vacios, pero entá nun espíos, porque nesta pumarada la fueya aguanta entero hasta mui tarde. La semeya, del 12/11/14. La pañada, el 08/11/14.
Xuan Xosé Sánchez Vicente: asturianista, profesor, político, escritor, poeta y ensayista. Articulista en la prensa asturiana, y tertuliano en los coloquios más democráticos. Biógrafo no autorizado de Abrilgüeyu
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXIX)
CLXIX
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llepre, f. Turba, multitud. ||
2. Algarabía.
llercia, f. Pánico, miedo. || 2. Pesadumbre. || 3.
Ser fantástico con que se asusta a los niños.
llerón, m. Cascajar, paraje donde hay mucho cascajo o piedras menudas en
gran cantidad y extensión. || 2. Paraje
lleno de cantos rodados. Son
frecuentes a orillas de los ríos o de la mar, aunque no son exclusivos de esos
parajes.
llimpar, dial. V. llimpiar.
llimpión, m. Limpión, limpiadura ligera. || 2. Rodillo de cocina. || 3. Trapo de limpieza, en general. || 4. En general, cualquier instrumento o
medio que se usa para limpiar. || 5. Repaso que se da a las
cosas o la ropa vieja para tratar de encontrar algo útil o reutilizable.
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXVIII)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
lleite, dial. V. lleche.
lleitona, f. dial. Vaca que tiene una cría a la que da de mamar.
llenda, f. Parte por la cual limitan dos predios. || 2.
Acción y efecto de llendar.
llende1, f. Lugar donde se apacienta el ganado. || 2. Acto de llendar. || 3. Parte por la cual limitan dos predios. || 4. Punto de referencia que se sigue en el
comportamiento de la personas o en el uso correcto de un idioma. || A la llende de, al pie de junto a. || En llendes, cansado o harto.
llendón, m. Porción de terreno dedicado a pasto exclusivamente. || 2. Bisbita de los árboles, pájaro
motacílido. Su nombre científico
es Anthus arboreus.|| 3.
Lugar donde apacienta el ganado. || 4.
Paraguas grande. || 5. Instrumento
eléctrico empleado para llendar el ganado. || 6. Terreno pequeño y de escasa calidad. || 7. Matorral
que sive de cierre o linde a un prado.
Willy Toledo: ¡Otru fenómenu!
Willy Toledo: "El capitalismo es incompatible con la democracia" (ayer, en Llangréu).
Yá se sabe lo que ye la democracia ye la Rusia de Lenin y Stalin, la China de Mao y la de güei, Corea del Norte, etc.
Pues val. Yo yá nun sé si ye un problema d'enfermedá intelectual, d'enfermedá psíquica o d'un problema cognitivu.
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXVII)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llavandera, f. Motacila o aguzanieves, pájaro dentirrostro, con el pico recto y
delgado, cola larga y patas delgadas y bastante largas. Su nombre científico es
Motacilla alba. || 2.
dial. V. llavadera. || 3. Personaje de la mitología asturiana.
|| 4. f. Figura del nacimiento que representa a una mujer lavando ropa.
|| Llavandera real, pájaro pequeño,
de color gris por encima y amarillo vivo por abajo y de rabo alargado y negro.
Su nombre científico es Motacilla cinerea.
llazu, m. Lazo, cuerda con lazada corrediza para cazar o sujetar animales.
|| 2. Ardid, trampa, asechanza. || 3. Cinta larga, estrecha y delgada de
tela que se utiliza para atar o adornar. || 4. Relación o cosa común con otra. || 5. Cada una
de las pizarras o maderas que, en las construcciones antiguas que usaban esos
materiales a modo de tejas, se colocaban ensambladas a media pieza y
descansaban alternativamente a uno y otro lado de la cubierta. || Tener llazu, tener sed.
llechón, m. Diente de león, hierba compuesta de flores amarillas de largo
pedúnculo hueco y semilla con vilano abundante y blanquecino, Su nombre
científico es Taraxacum officinale. || 2. Cerdo que todavía mama.
llechona, f. Cerda que todavía mama.
llegar, v. intr. Llegar, alcanzar un sitio o paraje. || 2. Alcanzar
una cosa que se halla situada en un sitio elevado. || 3. Completar la cantidad o el número de algo. || 4. Ser bastante para algo o alguien. ||
5. Quedar a la altura de otra cosa o
de otra persona. || 6. Extenderse
algo hasta un lugar. || 7.
tr. Acercar un objeto a otra persona.
|| 8. Llevar a alguien a un
lugar cercano o al que se puede llegar en poco tiempo. || 9. Realizar la acción de algo después de un proceso. || 10. prnl. Ir a un lugar cercano
o al que se puede llegar en poco tiempo. || Llegar a figu maduru, fam.
Cumplirse algo que se esperaba. || Llegar
a les manes, pelearse. || Llegar a panizu maduru, fam.
Cumplirse algo que se esperaba. || Llegar
a pintoriu, fam. Conseguir una persona o una cosa el fin que tiene.
|| Llegar a polleru, fam.
Conseguir una persona o una cosa el fin que tiene. 2 Madurar. || Llegar a tálamu, finalizar algo. || Llegar al corazón, afectar en el ánimo
algo que se dice o se hace. || Llegar el
samartín, fam. Llegar a alguien el momento de rendir cuentas. || Llegar y besar el santu, fam.
Ser muy fácil y rápido de conseguir. || Nun
llegar a llaurexu, no prosperar o no
crecer algo. || Nun llegar a los calcañares, ser de
inferior capacidad que otra persona o cosa. || Nun llegar a los calcaños, ser de inferior capacidad que otra
persona o cosa. || Nun llegar a pintoriu, no llegar a
realizarse una cosa. || || Nun
llegar la camisa al cuerpu,
tener mucho miedo. || Nun llegar la pación a la barriga, fam. Dícese
cuando alguien intenta aparentar que tiene más riquezas de las que posee en
realidad. || Nun llegar la sangre al
ríu, fam. No tener un conflicto o un problema mayores consecuencias.
|| Tar llegáu a la razón, tener pocos medios.
Dende San Pedru (Llastres)
Astuera y el so caseríu, San Telmu, en segundu términu (Pueden vese dos de les conches del Xurásicu). El Sueve, al fondu.
El 06/11/14.
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXVI)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llanguanona, f. Desmán de los Pirineos, mamífero soricomorfo de la
familia de los Tálpidos, De hábitos principalmente nocturnos, es un insectívoro
semiacuático que habita en las orillas de riachuelos y torrentes. Lo caracterizan
su morro con forma de trompeta. Su pelo es entre castaño oscuro y gris. Su nombre
científico es Galemys pyrenaicus.
llargatesa, f. Lagartija, especie de lagarto pequeño, muy común en Asturies,
ligero y espantadizo, que se distingue por tener la cabeza y la cola puntiaguda
y el cuerpo alargado y de color verdoso por encima, y blanco amarillento por el
vientre. Su nombre
científico es Lacerta muralis.
llastra, f. Peña grande y con aristas. ||
2. Peña alargada y tendida, generalmente en capas o secciones. || 3. Laja
, piedra más bien grande, naturalmente lisa, plana y de poco grosor.
llatidura, f. Latido, acción y efecto de llatir. || 2. Golpe del corazón al latir. || 3. Enfermedad que cursa con fatiga, dificultad respiratoria
y esfuerzo del corazón.
llavadora, f. Lavadora, máquina de lavar. || 2. Cantidad de ropa que contiene la lavadora. || 3.
Lavandera, mujer que tenía por oficio el lavar la ropa ajena cobrando por ello.
|| 4. Figura del nacimiento que
representa a una mujer lavando ropa.
Astuera, Llastres
El 06/11/14.
¡Un fenómenu (otru)!
Fai dos díes (24):
Fai un día (25):
Que conste qu'esti ye'l más llistu, y que lu escoyeren por oposición abierta (como al anterior). Pues nada, onde'l pueblu pon el güeyu Dios sanciona.
¡Y van yá...!
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado que su partido apoya la derogación del artículo 135 de la Constitución que obliga a la estabilidad presupuestaria de las administraciones, medida aprobada en la recta final del mandato de José Luis Rodríguez Zapatero con el apoyo del PP. Sánchez ha informado de esta medida en un foro titulado 'Desigualdad y democracia', organizado por UGT en la Escuela Julián Besteiro en Madrid.
Fai un día (25):
Pedro Sánchez aclara que no derogará, sino que completará, el artículo del déficit cero
Que conste qu'esti ye'l más llistu, y que lu escoyeren por oposición abierta (como al anterior). Pues nada, onde'l pueblu pon el güeyu Dios sanciona.
¡Y van yá...!
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXV)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llampaza, f. Terreno pendiente. || 2. Breve salida del sol en día lluvioso o nublado. || 3. Resto de materia que queda sobre el terreno cuando se quita o
se retira alguna cosa de él.
lláncanu,
a, o, adj. Estevado, que tiene las piernas
arqueadas, separándose entre sí a la altura de las rodillas y volviendo
a juntarse en los tobillos.
llancer, dial. V. llancir.
llancierta, f. Lagartija, especie de lagarto pequeño, muy común en España,
ligero y espantadizo, que se distingue por tener la cabeza y la cola puntiaguda
y el cuerpo alargado y de color verdoso por encima, y blanco amarillento por el
vientre. Su nombre
científico es Lacerta muralis.
llancir, v. intr. Llorar. || 2. Gemir.
|| 3. Quejarse. || 4. Provocar tirantez y dolor en la piel una llaga, una infección,
una cicatriz o semejante.
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXIV)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llambequisques, m. fam. Perro faldero.
llambericu, m. Golosina. || 2. Cosa atractiva o apetitosa.
llamberizu, m. Golosina. || 2. Cosa atractiva o apetitosa.
llambión,
ona, ón (ono), adj. Que lame. || 2. Goloso, aficionado a comer
golosinas. || 3. Deseoso o dominado
por el apetito de alguna cosa. || 4.
Apetitoso, que excita el apetito. || 5.
Dícese del instrumento musical que tiene un sonido especial o melódico. || 6. Curioso, aficionado a saber de la vida de los demás.
llambria, f. Superficie inclinada y resbaladiza de una pared de un picu o de un monte. || 2. Terraplén. || 3 Laja , piedra más bien grande, naturalmente lisa,
plana y de poco grosor.
Don Javier y don Pere, de Comedia (o la eterna comedia del PSOE)
Es este un articulo del 21/06/13. Se refiere a la concreta actuación por esas fechas de una vieja comedia que lleva representando el PSOE desde agosto de 2003, a raíz del Manifiesto de Santillana: la del "federalismo asimétrico". Verán cómo, a día de hoy, sigue siendo la misma.
(Por cierto, y para los señardosos: ¿Alguién se acuerda hoy de quién diablos es ese Pere (Navarro) del artículo? Pues hace poco más de un año pitaba muchísimo. ¡O tempora...!, o sea, ¿Ubi sunt...?
JAVIER Y PERE, DE COMEDIA
Esta
semana pasada. Han andado de comedia. Exactamente de «ñaque», aquella forma de
representación que Rojas Villandrando definía así en su El viaje entretenido: «Ñaque es dos hombres; éstos hacen un
entremés, algún poco de un auto, dicen unas octavas, dos o tres loas, llevan
una barba de zamarro, tocan el tamborino. Y cobran a ochavo y en esotros reinos
a dinerillo; viven contentos, duermen vestidos, caminan desnudos, comen
hambrientos y espúlganse el verano entre los trigos y en el invierno no sienten
con el frío los piojos».
La obra representada es, por
otra parte, antigua, muy antigua. Se trata del mismo texto que con el título de
«Manifiesto de Santillana» suscribieron los próceres del PSOE el 30 de
agosto de 2003. Menos de un mes más tarde, a mediados de septiembre, decía yo
con respecto al texto y al acto:
«Constituye, básicamente,
un conjunto de vacuidades a las que se suman algunas propuestas un poco más
concretas pero no muy precisas, como las de la reforma del Senado, la
conferencia de Presidentes o la de una cierta presencia de las autonomías en la
toma de decisiones de la Unión. Podríamos pensar que la declaración constituye
un puro acto propagandístico o tener por bueno lo que susurran muchos
socialistas: que una vez pasadas las elecciones catalanas, y cumplido el
trámite de prestar al candidato Maragall un soporte de credibilidad autonomista
/ catalanista, todo quedará en agua de borrajas. No lo hagamos: creámoslos,
tomémoslos en serio».
«Es sabido que, desde el
primer momento de la constitución del estado de las autonomías, vascos y
catalanes no se encuentran cómodos en su encaje constitucional. Una parte
porque no quieren estar en España, otra porque no acepta que los niveles de
autonomía tengan una cierta homogeneidad en las diecisiete comunidades. De esa
manera, vascos y catalanes han hecho, desde 1982, diversas propuestas de
modificación del statu quo. La del PSC de Maragall se conceptúa como «federalismo
asimétrico» y busca, en sustancia, una Cataluña menos integrada en España y que
transfiera menos riqueza al resto de comunidades. La propuesta no solo responde
a la concepción que el candidato socialista catalán tenga de su país o del
Estado, sino que se constituye como un elemento básico para tratar de captar
votantes de CiU en las elecciones autonómicas».
Pues bien, desde esa fecha
las dos variables, la del federalismo asimétrico y la de la financiación
insolidaria para Cataluña, han venido siendo impulsadas, aplaudidas y votadas
por todo el PSOE, sin excepción, incluidos el califa don Vicente, y el califa
en lugar del califa, don Javier. Las declaraciones de ambos y los apoyos
explícitos al Estatut y a los privilegios de Cataluña —incluidas fotos en la
Generalitat— están a disposición de quien quiera verlas. Es cierto que, cuando
se les ha preguntado en su tierra, ambos gestores del gobierno asturiano para
el PSOE se han mostrado incómodos y han boriado algunas respuestas que
pretendían sugerir una cierta incomodidad o desacuerdo. Pero después, en la
práctica, han apoyado todas las decisiones políticas y textos jurídicos que han
avanzado por esas dos líneas, federalismo asimétrico y financiación
privilegiada para Cataluña.
Por cierto, y ya que todo
el PSOE, desde el señor Rubalcaba hasta sus palafreneros de la FSA, llevan más
de una década hablando de federalismo, ¿podrían decirnos de qué federalismo hablan,
porque hay tantos en el mundo como estados complejos existen? ¿Serían capaces
de explicarnos en qué aspectos concretos no es hoy España un estado federal?
¿Se trataría de un estado federal a cuatro o también contaríamos los
asturianos? Y, ya por molestar, una cuestión nada baladí: ¿hablamos de un
federalismo de big-bang o de big-crunch?, ¿para garantizar una mayor
homogeneidad y equidad entre los ciudadanos o para garantizar la superioridad
de unos cuantos?, ¿a fin de fortalecer la unidad territorial o para preparar la
marcha de algunos?
Sobre esta historia tan
vieja de engaño y traición a los asturianos y a otros, un aspecto novedoso, el
de la incesante actividad de Pere Navarro. Como se sabe, don Pere venía
actuando de «bululú», que es, según el citado Villandrando, «un
representante solo, que camina a pie y pasa su camino, y entra en el pueblo,
habla al cura y dícele que sabe una comedia y alguna loa: que junte al barbero
y sacristán y se la dirá porque le den alguna cosa para pasar adelante. Júntanse
éstos y él súbese sobre un arca y va diciendo: «agora sale la dama» y dice esto
y esto; y va representando, y el cura pidiendo limosna en un sombrero, y junta
cuatro o cinco cuartos, algún pedazo de pan y escudilla de caldo que le da el
cura, y con esto sigue su estrella y prosigue su camino hasta que halla
remedio». Pues así, don Pere. Venía, en particular viaje entretenido, de
hablarnos de la reforma constitucional para la monarquía. Ahora parece, que
tras acercarse al planeta don Javier, su
trayectoria gravitacional se ha acelerado y ha pasado a representar la reforma
constitucional para vascos y navarros.
Esperemos que, con el pan y la escudilla del cura halle
pronto remedio y, con ello, reposo. Por él, por ellos. También por nosotros. ¡Porque
tantos años la misma comedia, ya fiede!
Xuan Xosé Sánchez Vicente
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXIII)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
llábana, f. Losa, piedra grande plana y lisa. || 2. Laja ,
piedra más bien grande, naturalmente lisa, plana y de poco grosor. || llábana d’aleru, cada una de las que se coloca solapada en el hastial del tejado, a fin de evitar
el desplazamiento de las tejas al protegerlas del viento.
llacierta, f. Lagartija, especie de lagarto pequeño, muy común en
Asturies, ligero y espantadizo, que se distingue por tener la cabeza y la cola
puntiaguda y el cuerpo alargado y de color verdoso por encima, y blanco
amarillento por el vientre. Su
nombre científico es Lacerta muralis.
lladra1, f. Riña. || 2. Griterío.
lladra2, dial. V. lladre.
llaguazal, m. Laguna. || 2.
Charco.
llaguazu, m. Laguna. || 2. Charco. || 3.
Variedad de brezo,
constituido por una mata de entre 15 y 60 cm, tronco retorcido, hojas
verticiladas por tres; flores pequeñas y moradas, en ramitos compuestos y alargados.
Es muy frecuente en Asturies. Su nombre científico es Erica cinerea.
La Griega, La Villeda, El Sueve, Vistalegre
El 06/11/14. El sable La Griega; na parte derecha, Vistalegre. Detrás de La Griega, La Villeda, onde hai un castru. Al fondu, El Sueve,
Arreyos al Diccionariu asturianu-castellanu (CLXII)
Sigo colos arreyos y modificaciones al mio Diccionariu asturianu-castellanu. Les novedaes, en gris.
lince, m. Mamífero felino con las orejas puntiagudas, semejante al gato. Su nombre científico es Lynx
lynx. || Ser un lince o como un
lince, ser muy avispado.
liña, dial. V. lliña y llinia.
lintel, m. Dintel, pieza
superior de la puerta , de la ventana o
de otros huecos que carga sobre las jambas.
lique,
m. Liquen, planta
criptógrama que se forma al asociarse un hongo con un alga.
liscar, v.in tr. Salir corriendo. || 2. Largar, partir de un sitio con
prisas o de mala manera.
La Griega, la rimada La Villeda
Y l'arranque del pedréu (en delles partes del añu, sablera, como agora) hacia Llastres.
El 06/11/2014.
¿Ciencias políticas? ¡No me joda!
Unos tipos que dan clase en la facultad de Ciencias Políticas deberían ser todos puestos a disposición de la justicia por embaucadores. "¿Ciencia política?", como "hierro de madera". ¡No me jodan! Acaso, a lo más, "técnicas de manipulación política", que eso sí.
Cuervos, pantalán, ocla
El "pantalán", el restu l'antigua estructura onde cargaben los barcos el carbón que venía de Carrandi en vagonetes aérees.
Dende él tírense nel veranu los "fueos del pantalán. Suelen añerar nél (como güei) los cuervos o cuervos marinos (cast. "cormorán").
Los fiensos que tán al fondu son d'un cultivu esperimental d'ocla, que lleva yá llustros ehí.
El 06/11/2014.
CONTRA LA EXISTENCIA DE ASTURIES
CONTRA
LA EXISTENCIA DE
ASTURIES (22/09/2005)
En los
primeros años de nuestra era, a lo largo de la muralla de Adriano, que separaba
la Britania
romanizada de lo que hoy es Escocia, se disponían una serie de guarniciones
militares, de las que tenemos noticia a través de diversas fuentes. Entre
aquéllas, la llamada Ala Primera de los Ástures (“Asturians”, escriben los
historiadores ingleses) en lo que es hoy Benwell; la Segunda de los Ástures, en
el actual Chesters. Significativamente, la Primera Cohorte de
Hispanos (“Spaniards”) tiene su ubicación en otro lugar de la misma línea
defensiva. (No puedo dejar, por cierto, de anotar que, empujados por la señardá,
aquellos antepasados nuestros llevaron consigo a Inglaterra un vástago de su
patria, una pequeña enredadera, la Erinus Hispanicus , un endemismo asturiano,
cuyos zarcillos esguilen hoy todavía por las viejas piedras de
Chesters).
Las actuales
excavaciones de La Carisa
nos han hecho ver que, algunas décadas antes de la invasión romana, los
asturianos poseían (esto es, poseíamos) una fuerte estructura social que les /
nos permitió organizar una poderosa y duradera resistencia militar contra Roma.
<<La Carisa
demuestra que los astures ya tenían identidad social y territorial hace 2000
años>>, dice el General Francisco Ramos Oliver, en declaraciones a la Nueva España , a
principios de septiembre.
Ocuparía mucho
espacio una brevísima exposición de momentos históricos en que nuestra
identidad como pueblo se documenta por propios o ajenos. Dejaré constancia aquí
de tres: el Poema de Almería (en torno a 1147) donde se señala que acude
al combate <> con sus tropas, junto a otras
del Reino; la Crónica
Pelayana , para la cual los asturianos se habían
convertido en el pueblo elegido por Dios (<>); el
testamento del Rey Casto, que señala que la victoria de Pelayo <> (asturiano, no
otro).
De modo que, a
lo largo de los siglos, la conciencia de una singularidad de los asturianos
como pueblo ha sido siempre una evidencia, tanto entre la gente común como
entre los intelectuales. Desde el último tercio del siglo XIX, sin embargo, se
suceden proclamas que niegan la existencia de una colectividad asturiana, de
alguna singularidad histórica o cultural suya o del derecho a tenerla.
Esos
comportamientos se manifiestan de mil modos, unas veces de forma explícita,
otros mediante una sutil ocultación de la realidad. Así, frente a la evidencia
de La Carisa
(y otras muchas) el discurso oficial ha sido siempre –—y sigue siendo— el de que
no hubo nunca una Asturies anterior a Roma, sino solo una serie de tribus
desagregadas (y borrables, por tanto, del mapa y la memoria sin mayor pena),
con el único vínculo común del territorio. Lo ejemplifica perfectamente el
comportamiento de la inteligentsia regional a propósito de una
exposición organizada durante el gobierno de don Antonio Trevín: Ástures,
pueblos bárbaros en la frontera del Imperio, se denominaba. En contraste,
una muestra del mismo género en Cantabria llevaba por título el de Cántabros,
el origen de un pueblo.
Ese mismo menosprecio o afán por evitar cualquier
elemento que pudiese reflejar una consciencia de lo asturiano se hizo patente igualmente en
el nulo interés que los ponentes estatutarios tuvieron en cambiar el nombre de
“Provincia de Oviedo” por el de “Asturies” (lo propuso quien esto firma) o en
los más de diez años en que nuestras mayorías parlamentarias llamaron al
gobierno “Gobierno regional”, evitando cuidadosamente el nombre de nuestro país
(frente a lo que, por ejemplo, hicieron nuestros vecinos, titulándose “Gobierno
de Cantabria”). En el colmo del despropósito, una ciudad, Xixón, levanta una
estatua al exterminador y depredador (Augusto), en el entendimiento de que vino
a traernos la luz, frente a las tinieblas que ellos (los asturianos, es decir,
nosotros) representaban. En otras ocasiones, ese tipo de mentalidad no se
limita a ocultar la evidencia o a mistificar la realidad, sino que se entrega a
vehementes ataques contra lo asturiano o sus valedores (un ejemplo clásico de
ello es Clarín; muestras hodiernas las encontrarán ustedes en su memoria más
reciente).
El tipo de
gente que se entrega a esa vehemente —y a veces sañuda— lucha contra lo
asturiano suele definirse por uno o dos de estos rasgos: pertenecen a las élites
intelectuales o de poder que se mueven en el amplio marco del Estado o que
aspiran a triunfar en él; no son nacidos en Asturies. Los partidos políticos
estatales son una especialización vehicular de estos trabajos de negación de lo
asturiano y de estas aspiraciones a borrarnos de la faz de la tierra como
colectividad actuante, esto es, como pueblo.
Los
bienintencionados podrían pensar (o excusarse con ello los de la cuerda y sus
beneficiados) que, a fin de cuentas, esa negación o ese poner en solfa la asturianidad
no tiene otro interés que el emotivo, el cultural o el romántico, y que pocos
efectos prácticos tiene esa hostil y terca negación. ¿Qué más da, argumentarán,
que, por ejemplo, nos llamemos oficialmente Asturias o no? Aun suponiendo que
las emociones, la historia, la cultura, el sentimiento y la memoria colectivos
no tengan importancia alguna, se equivocan.
En primer
lugar, porque podrían citarse muchos casos en que, al hacer tabla rasa de la
identidad asturiana (o de sus peculiaridades, si ustedes quieren), se han
dañado los intereses concretos de miles de asturianos. Dos muestras nada más:
la arbitrariedad de negar un derecho foral asturiano ha damnificado
expectativas y derechos de individuos y familias; igualmente, el hacer tabla rasa de las peculiaridades
de nuestro “derecho” en materia de montes ha incentivado la ruina de muchos,
ayudado a la despoblación rural, generado desidia en su cuidado, incentivado
incendios sin cuento. Perjuicios y agravios múltiples a lo largo de muchos años
por el prejuicio de no aceptar la realidad asturiana como es y, por tanto, no
defenderla.
Pero es que,
además, convenientemente manejada por los partidos centralistas, esa mentalidad
ha causado la
falta de visión de cuáles son las prioridades asturianas y, por tanto, ha
provocado la indefensión o el conformismo colectivo, pretiriendo nuestros
intereses en función de los ajenos (videlicet, apoyando las pretensiones
catalanistas, que redundan en contra nuestra) o lanzándonos a locas aventuras
de sangre como vanguardia cuya realidad pesa poco en la balanza del Estado (tal
el 34).
Y, en último
término, ¿alguien juzga separable este nuestro caer los últimos tiempos, año
tras año, en los parámetros de empleo, actividad económica y bienestar, de esa
mentalidad que niega la identidad de Asturies como pueblo, y aun como cosa a
considerar en sí, y la somete a intereses y empresas siempre tenidos como más
altos o importantes?
No. Quienes
niegan o atacan nuestra identidad y nuestra existencia como pueblo no menoscaban un concepto
o mancillan una emoción. Su víctima no es el ente abstracto de Asturies, sino que lo son los
concretos e históricos ciudadanos asturianos.
ADDENDA: EN LA DÉCADA DE 850
COMIENZA A HABER UN ÉXODO HACIA ASTURIES DE LOS MOZÁRABES: «Así lo dice
expresamente la Rotense al hablar de la repoblación de las ciudades de León,
Astorga, Tuy y Amaya Patricia, «de antiguo abandonadas», a las que Ordoño
«llenó de gentes, en parte de las suyas, en parte de las llegadas de España». Y
esa España, en las crónicas de ese período, era el territorio bajo dominio
musulmán».
El pantalán y los cuervos
El "pantalán", el restu l'antigua estructura onde cargaben los barcos el carbón que venía de Carrandi en vagonetes aérees.
Dende él tírense nel veranu los "fueos del pantalán. Suelen añerar nél (como güei) los cuervos o cuervos marinos (cast. "cormorán").
El 06/11/2014.
Sobre democracia, bilordierismu, igualitarismu y redes sociales
CONTICUERE
OMNES, INTENTIQUE ORA TENEBANT...
A la memoria de Baltasar Vicente Montes
“Callaron
todos y alzaban, atentos, sus rostros”. Tal es el conocidísimo comienzo del
Libro II de la Eneida. Poco antes, la infeliz Dido había pedido al
ascendiente de Augusto que contase su historia, desde la desgracia de Troya
hasta la llegada a Cartago. Y cuando Eneas comienza su narración, los súbditos
de la Reina siguen sus palabras con la avidez en esos versos expresada. También
Alcínoo, el Rey de los feacios, pide a Ulises: “Pero vamos, dime –e
infórmame en verdad- por dónde has andado errante y a qué regiones de hombres
has llegado”.
Esa
necesidad de saber nuevas ha generado en nuestra literatura todo un subgénero,
el del “diálogu noticieru o bilordieru”, en el que el encuentro entre dos
personajes suscita la información proporcionada a uno de ellos (y, a su través,
al lector) de las realidades del momento. Como en tantas cosas, es el primero
Reguera (“Diálogu ente Xuan y Toribiu sobre les coses que pasaren en tiempu del
autor”), y le siguen una pléyade, en la que destacan Balvidares o Xosefa de
Xovellanos. Así arranca, de ésta, el “Debuxu de les funciones que se ficieren
na ciudá d´Uviéu pa celebrar la coronación de Carlos IV”: Munchu me fuelga,
compadre, / afayate cabu casa, / que trayo que te cuntar / arriendes d´una
selmana.
¿Es
sólo el hecho de gozar de un relato el que suscita la concurrencia o sostiene
la atención de los oyentes? Sin duda hay mucho más. Cuando Atenea (disfrazada
de heraldo) discurre entre los feacios para excitar entre ellos el favor hacia
su protegido Ulises, le dice a cada uno: ¡Vamos caudiellos y señores de los
feacios! Dii al ágora pa que vos informéis sobre´l forasteru que llegara de va
pocu a ca´l prudente Alcínoo dempués de
percorrer el pontu, netu nel so cuerpu a los inmortales! Y es que la diosa
conoce de sobra una de las ansias más profundas de los humanos: saber de los
otros.
Así,
pues, es la misma la concupiscencia de conocer del prójimo que anidaba en la
psique de nuestros antepasados –y posiblemente, la tutela con que se fingía los
dioses protegían a los forasteros no constituía más que una formalización
ritual para amparar ese vehemente deseo de conocer nuevas-, la que se cobijaba
en los bilordios de las matronas de barrios y pueblos y la que aguija
con dedo impaciente el mando de los televisores en busca de dramas reales y
confesiones, de desnudos del alma. Responde todo ello a una profunda necesidad
de nuestra constitución, que nos lleva a devorar el ser de los otros (su
externidad y su internidad) con una doble finalidad: salir de nosotros, de
nuestro yo, para no sentirnos aislados, solos; sumergirnos en otros yos para,
así –sin dejar de ser nosotros- sentirnos parte de un todo. No son otras las
demandas emocionales que están detrás del amor y de las religiones.
La
globalización, las nuevas tecnologías, la multiplicación de los bienes y
servicios ha disparado ahora las posibilidades de esa observación y proyección,
la variedad de las mismas, su multiplicidad, su inmediatez; pero no representa
novedad alguna, sino más bien, la posibilidad de dar mejor satisfacción a ese
antiguo anhelo.
Por
otro lado, algunas de estas nuevas opciones han significado una radical
mutación para dar cumplimiento a otra profunda aspiración humana, la de ser
reconocido por los otros como único (lo que previamente implica, obviamente, el
ser conocido). Algo semejante a lo que en la Fenomenología del espíritu
Hegel ha llamado “el deseo de reconocimiento”, un sentimiento cuya ausencia o
menosprecio constituía para Hobbes una de las causas de la heraclitiana guerra
universal en el estado de naturaleza. Es así como se explica la imparable
demanda del “minuto de gloria” en la televisión –aun a costa de humillaciones o
impudores- y el éxito de blogs o chats en internet: cada uno de los
intervinientes o entrevistados puede “ser” tanto como “es” otro cualquiera.
Las
quejas que en muchos “intelectuales” y exquisitos provoca esta situación de
vulgaridad y tabla rasa tiene mucho que ver con que han dejado de ser los
únicos que poseían derecho a ocupar el espacio público en busca de
“reconocimiento”. Pero, sobre todo, a que desconocen que esas, la de la
ausencia de jerarquías de opinión, la de la igualdad de las propuestas y de sus
emisores ante la colectividad, no son más que una consecuencia de la
democratización progresiva del mundo contemporáneo, que avanza no a través de
la apropiación de lo de unos por los otros o mediante el triunfo final de la
razón o la clase –como se profetizó-, sino por la multiplicación de bienes y
servicios, que, por su propia existencia, se ponen, cada vez más al servicio de
todos.
Quizás
convenga aquí citar, para concluir, unos párrafos de Alexis de Tocqueville, el
hombre que vio con absoluta claridad, en la temprana democracia estadounidense
(en la primera mitad del XIX), las características del predominio social del
hombre común en una sociedad igualitaria. “En cuanto al influjo –dice- que la
inteligencia de un hombre puede ejercer sobre la de otro, necesariamente ha de
ser muy restringida en un país cuyos ciudadanos, muy cerca de la igualdad y del
mutuo conocimiento, no reconocen a nadie una grandeza o una superioridad
indiscutibles”. “Todo cuanto digo de los americanos es aplicable, por lo demás,
a casi todos los hombres de nuestros días –anuncia en otro capítulo-. La
variedad desaparece de la especie humana; las mismas maneras de obrar, de
pensar y de sentir se dan en todos los rincones del mundo. Y no sólo porque los
pueblos tengan ahora un trato más frecuente unos con otros y se copien con más
fidelidad, sino porque en cada país los hombres /.../ llegan simultáneamente a
lo que más se acerca a su naturaleza, que es en todas partes la misma. Terminan
así siendo iguales aunque no se imiten”.
En
el último capítulo de La democracia en América Tocqueville señala que el
despotismo que amenaza al mundo futuro no será tanto la tiranía o un
aristocratismo clásico, sino el de la vulgaridad aplastante e igualitaria: “Veo
una inmensa multitud de hombre parecidos y sin privilegios que los distingan
incesantemente girando en busca de pequeños y vulgares placeres con los que
contentan su alma, pero sin moverse de su sitio.”
Y
es que no en vano los griegos, que nos mostraron el impagable bien de la
democracia, no pudieron ocultar que, como una ganga indesarreyatible,
los sicofantes, la demagogia y el ostracismo utilizado contra los mejores
formaban parte inevitable de la misma.
(28/11/05, La Nueva España)
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Delles notes sobre el Vocabulario asturiano y castellano...
Acaba de llegame'l númberu 111 de la revista Lletres Asturianes, qu'edita l'Academia. Pues bien, ehí asoleyo un artículu Delles notes sobre'l "Vocabulario asturiano y castellano, coleccionado de la viva voz del pueblo / Some notes on de "Asturian and Castilian vocabulary, collected from the real voices of the people".
Faigo un desamen del vocabulariu, señalo los sos erros o la particularidá de les sos definiciones, desenguedeyo dalgunes, y trato de solventar delles cuestiones al rodiu de dalgún vocabulariu imprecisu de los clásicos y de les sos interpretaciones, asina como sobre dalgunos retayos de testos.
Como siempre, la revista trae una mozaína d'artículos interesantes, de toa mena: filoloxía, toponimia, dominiu llingüísticu asturianu, enseñanza, hestoria cultural y lliteraria, televisión y llingua.
Cataluña, economía y argentinización
A propósito de los riesgos que para la economía entraña la cuestión catalana, que ahora empiezan a apuntar los mercados y las agencias de calificación (a Ficht la ha seguido S& P), permítanme recordarles literalmente lo que decía el 11/07/12, en un artículo titulado "Profecías y jaculatorias" (y apunten, por favor, lo de la "argentinización").
En todo caso, y ya que vamos de profecías, permítanme que yo reitere otra: si las variables de argentinización de nuestra sociedad y las de la evolución de la cuestión catalana no pesan demasiado; si, como parece posible, los asuntos de la estabilidad del euro y de la financiación bancaria se resuelven, si cumplimos razonablemente el objetivo de déficit, pronto se calmará el panorama y, antes de lo que pensamos, empezaremos a crecer, aunque muy lentamente. Tengan por seguro que, por equivocarme, no me premiarán, como a doña Elena Salgado, con un chollín en ENDESA de muchos miles de euros anuales. Me los quitarán, aun acertando, PSOE, IU y UPyD. Pero ese es otro tema, que para ustedes, sin duda, tiene un interés menor.
La realidad va mostrándose tal como es
Les invito a ver lo que dice Teresa Mesa, la que fue portavoz de Teresa Romero durante muchos días,
en La Voz de Galicia hasta que el marido de esta, Javier Limón la echó, dice de las "demandas" de Teresa
y su marido, así de cuál es el papel del abogado en todo esto y qué clase de abogado es.
SE CUMPLE LO QUE LES HABÍAMOS ANUNCIADO QUE OCURRIRÍA.
Les transcribo aquí parte de la entrevista:
-¿Ha hablado con Teresa Romero desde que salió del hospital?-No. La última vez que lo hice fue para explicarle que había dejado de ser portavoz. Me preguntó por qué había dejado solo a Javi, y que le habían dicho que era por agotamiento. Le dije que no era así, que estaba agotada porque tenía que atender a los medios y mi trabajo, pero que su marido, por orden del abogado, me había quitado. Me respondió que no entendía nada. Cuando se enteraron de que había hablado con ella, le retiraron el teléfono.-¿Ha intentado ponerse en contacto con ella otra vez?-Sí, pero no me ha cogido el teléfono. Seguro que mi número lo tiene bloqueado. No es que no quiera hablar conmigo, es que la tienen como raptada. Cuando hablé con ella le dio mucha alegría, pero ha estado encerrada en una habitación y a saber qué le han contado.-¿Desde cuándo la conoce?-La conocí hace diez años. Vinieron a mi tienda para que les echara las cartas. Manteníamos una amistad desde entonces.-¿Quién la eligió para ser la portavoz de la familia?-Fue Limón. Me enteré por los medios de comunicación de lo que les estaba pasando, e intenté hablar con ellos. Él había desconectado el teléfono, y le envié un correo electrónico en el que le decía que estaba con ellos emocionalmente y que los quería mucho. Entonces me llamó, me dijo "ayúdame, estoy muy solo, me encuentro muy mal anímicamente, me han matado al perro"; se desmoronó y empezó a llorar. Me dijo que la única persona que quería que fuese a verle era yo, porque su familia no había reaccionado. Fui, y él dio la orden de que subiese. El hermano de Teresa estaba abajo haciendo declaraciones, bastante desafortunadas, diciendo que a lo mejor Teresa se había tocado con el guante: le superaba todo esto. Yo se lo comenté a Javi, que lo vio por Internet, y me dijo que le comunicara que se apartara y que fuera yo quien hablara con los periodistas.-Responsabiliza al abogado José María Garzón de su apartamiento.-Sí. Aparece un día y yo salgo despedida. Ese mismo día me dijo que todos los platós de televisión que hiciese tenía que pactarlos con él, porque había que estirar las apariciones en televisión. Y yo le respondí que pactar qué, si no cobraba. Le dije que se metiera en lo suyo, que es lo jurídico, y a mí me dejara hacer lo mío, actuar de portavoz, que lo estaba haciendo bien. Fui a ver a Javi y hablé con Teresa, que me dijo que quería dar un abrazo a sor Paciencia por haberle salvado la vida, lo que había comido y que estaba desesperada, la pena que tenía con lo del perro. Cuando bajé a hablar con los medios de comunicación, lo conté. El abogado me dijo que había revelado una conversación privada y que no me quería más allí. Era un jueves, yo le había dicho a Javier que me iba el lunes porque no tenía sentido seguir como portavoz cuando dieran el alta a Teresa.-Mantiene que Garzón ha engañado a algunos de sus clientes.-Hay muchas personas que dicen haber sido engañadas por este individuo: los padres de Sandra Palo, la madre de Rocío Wanninkhof, la clínica Bruselas de cirugía estética, una Miss España, etcétera. El mismo día que dejé de ser portavoz, me llamó la madre de Sandra Palo y luego empezaron a lloverme llamadas de supuestas víctimas que me pidieron ayuda. Yo no puedo volverles la cara. Hay muchas, muchísimas presuntas víctimas de Garzón.-¿Qué le parecen las demandas que ha presentado Romero?-Una barbaridad. No se pueden pedir por un perro 150.000 euros. No quiero decir que haya estado bien sacrificar al animal, porque se había podido haber investigado con él. Es el modus operandi de Garzón, pedir barbaridades y llevarse el 10 %. La que ha presentado contra el consejero Javier Rodríguez está bien, pero lo que no son acertadas son las cantidades que pide...
Entrevista en La Nueva España
directo al corazón
"Era feliz con mi cátedra, pero me han echado para casa las medidas de ahorro"
"Soy impaciente con los demás, quizá porque veo las cosas antes, y haber sido el parlamentario más joven de Asturias me provoca melancolía"
16.11.2014 | 05:51
Por Cuca Alonso Posiblemente sea el pelirrojo más célebre que ha dado esta tierra. Una figura mítica pese a que su edad aún no se lo permite. Hoy, a los 65 años no ha perdido el carácter de revolucionario de guante blanco que alumbró su trayectoria política, aunque le haya sosegado la experiencia; fue el diputado más joven de aquella primera legislatura asturiana, con apenas 30 años. Un chaval, pero ya llevaba su cátedra bajo el brazo, obtenida a los 24 años. Político, escritor, ensayista... Con todo ello, su charla es una delicia. Ha sido fundador y presidente del Partíu Asturianista, entre otras responsabilidades.
-Por favor, defínase.
-Soy un puntu asturiano, de Xixón (1949), que mantiene gran interés por los asuntos de los demás y las cosas de su tierra. Felizmente casado con Elena Fernández Poch, tenemos tres hijos y tres nietos. Ateniéndose a medidas de ahorro, el 1 de septiembre me echaron de mi cátedra; yo hubiera deseado quedarme hasta los 70 años, pero... médicos y profesores éramos los más caros, y sumada la antigüedad...
-¿Cómo lo lleva?
-Al principio mal, y ahora resignado. Era feliz con mi trabajo pese a que muchos compañeros estaban deseando salir corriendo. Yo creo que tenía cierta autoridad y esto me ayudaba a controlar las clases.
-¿De pequeño fue el cabecilla de la panda?
-Sí, supongo que sí. Aparte, era el mayor de los hermanos. José Miguel Caso me llamaba el revolvín.
-Supongo que ser pelirrojo le habrá señalado...
-Me llamaban el Roxu, no el rojo, pese a ostentar la doble alusión. Hoy las canas me hacen parecer rubio, pero sólo por la cabeza. Una vecina me decía "Azafrán".
-¿Dónde vive?
-En El Llano, donde nací. Tras una temporada en El Bibio, regresé a mis raíces. De mi casa actual me están echando los libros; tengo una gran biblioteca, en la que predomina la novela, la filología y todo lo relacionado con Asturias.
-Vamos con la política, ¿qué piensa de Cataluña?
-Que es un enorme problema que nadie sabe cómo va a acabar. Tal vez ocurra como en el 31 o el 34, que salieron al balcón y proclamaron la independencia. Con consecuencias gravísimas en el ámbito económico, sobre todo para ellos. Las propuestas del PSOE no valen para nada, son las mismas de 2003, es decir, idénticas al Manifiesto de Santillana que dio paso al Estatut. Ese federalismo asimétrico que está diciendo el PSOE no sirve; ellos quieren la independencia. En cuanto al PP, actúan de la única forma que le cabe al Gobierno.
-Y a todo esto, viene Podemos...
-Son unos tipos peligrosísimos, cuya propuesta económica nos llevaría a la ruina; a ser todos más pobres, a que aumente el paro y la emigración. En sus filas los hay que se declaran leninistas, y está muy visible la práctica económica del leninismo. Otros son aquellos mozos, hoy viejos, a quienes les quedó una revolución pendiente.
-Hay quien ya habla de un Gobierno de emergencia, PP-PSOE...
-En Europa funcionan así, los ciudadanos quieren acuerdos, pero luego castigan en las urnas a quienes llegaron a esos acuerdos, sobre todo a los que accedieron desde la oposición. Aquí falta cultura de alianzas, y eso es muy grave.
-Se acusa a Rajoy de permanecer demasiado mudo.
-Tiene un estilo diferente a la generalidad; habla cuando quiere y eso no gusta mucho a los medios que desean una excitación para montar las tertulias.
-¿Usted escucha a Jiménez Losantos?
-Lo hice durante una temporada. Es un tío muy listo, muy culto, pero también sectario y tergiversador.
-¿Qué pasa en Asturias, que nunca prospera el nacionalismo?
-Carecemos de espíritu colectivo. Lo estamos viendo con las Cámaras de Comercio, cuando debería haber sólo una, o con las clásicas enemistades locales. Pero la causa mayor es que estamos acostumbrados a mirar únicamente a Madrid. Y nos falta querernos más.
-¿Cree que España atraviesa un momento critico?
-Sí, y posiblemente grave. Si lo de Cataluña prospera, detrás va a ir Euskadi. Subiría la prima de riesgo, la deuda, el paro; no se podría atender a la sanidad, las pensiones... Espero que se salve la situación y que acabe en la cárcel quien tenga que hacerlo, pero no nos confundamos, no sólo es eso, sino que tiene que mejorar la situación colectiva de los españoles, que somos todos.
-Oiga, el bable permanece estancado...
-Es lo mismo de siempre, los asturianos nos avergonzamos de lo nuestro. Algo que no ocurre en Galicia, por ejemplo, donde se habla gallego con normalidad.
-De su larga responsabilidad política, ¿qué etapa le satisface más?
-Sin duda los ocho años que el Partíu Asturianista, que yo presidía, se mantuvo en el Parlamento asturiano, en los que pudimos hacer muchas cosas.
-¿De qué aspecto de su carácter se siente menos orgulloso?
-Soy impaciente con los demás, quizá porque veo las cosas antes. Y haber sido el parlamentario más joven me provoca melancolía.
-¿Qué talento añadiría a su personalidad?
-El de cantar mejor. Canto medianamente bien en las fiestas familiares.
-¿Le queda algún sueño por realizar?
-Sólo uno. Que nos vaya bien a todos, empezando por la familia.
-¿Quién ha sido su maestro?
-José Miguel Caso, con el que tuve gran amistad; Engracia Domingo, Francisco Vizoso...
-¿Con qué se le parte el corazón?
-Viendo a los niños que sufren o a personas a las que se les humilla. Con los que pasan necesidades, sobre todo si son jóvenes o antes fueron ricos. Con los viejos que te sonríen buscando un saludo porque se sienten nadie.
-¿En qué emplea el ocio?
-Corro, voy a pescar pulpos al pedreru, o trabajo en una pomarada que tenemos en Colunga, donde mi esposa cuida sus flores.
-Si volviera a empezar...
-Puede que hiciera lo mismo, pero con alguna duda respecto a mi entrega absoluta a algunas cuestiones. Tendría más astucia política de la que tuve.
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