Otra vez la propaganda de Zapatero y el PSOE a costa del bolsillo de los ciudadanos; otra ocasión en que, con palabras y discursos, se trata de esconder la realidad; un nuevo paso hacia el encarecimiento de los bienes de uso diario; un reblagu más para que las empresas pierdan competitivadad. A cargo, como siempre, de los progresistas; con la complicidad, como siempre, de quienes los votan y los sostienen -en nombre de la justicia, el igualitarismo, la libertad, el progreso, y hasta del proletariado y el empleo.
Como se sabe, Zapatero y sus mariachis concedieron hace poco a sus amigos multimillonarios (¿qué tendrán los cresos y los midas que tanto entusiasman a los socialistas?) dos nuevas televisiones en abierto, La Sexta y Cuatro. Peleadas a muerte por el fútbol, ambas tienen deudas muchimillonarias. Al mismo tiempo, su competencia con las demás televisiones por la limitada tarta publicitaria ha hecho menguar los ingresos de todas.
Para solucionarlo, Zapatero y los progresistas (¿progresarán todos tanto como Felipe González y sus amigos mexicanos?) ponen en marcha una operación múltiple: quitan los anuncios a TVE y, así -esperan-, los aproximadamente 600 millones de euros anuales que recaudaba en publicidad pasarán a las privadas. El resultado previsto de esta operación es que: a) las privadas que no son estrictamente de sus amigos quedarán agradecidas, y aún un poco más sometidas; sus amigos seguirán siendo agitadores pro-PSOE, especialmente en su versión zapateresca; la TVE seguirá tan sometida como siempre.
No acaba ahí la cosa: las privadas, además de una tasa para sufragar TVE, deberán seguir cotizando con un 5% para el cine español, esto es, para los amigos del agit-prop cultural zapaterino.
Y el colmo es que, además, exigirán a los operadores de telefonía móvil un canón del 0,9 %, como ya habíamos denunciado en algún medio de comunicación hace unos días, lo que supondrá que subirán los precios a los ciudadanos de a pie (a usted y a mí) y a las empresas, lo cual redundará en su ya escasa competitivad en los mercados internacionales. ¡Estupendo! Una vez más, se cumple la evidencia: "socialismo es paro (para la mayoría) y negocio (para los amigos)".
Por cierto, ¿qué fue de las concesiones de TDT hechas por el Gobierno asturiano? Ya se han superado con mucho los plazos para su puesta en marcha y no hemos visto ninguna funcionando. Claro que como Asturies no existe ni para los asturianos, que sólo nos preocupamos de los escándalos que nos proporcionan en Madrid..., ¿quién va, ya no a decir nada, sino a percatarse de la situación?
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