Ya que llegan las fiestas navideñas y los Reyes, me van a permitir que siga recomendándoles algunas de mis obras. Lo hago más por el editor que por mí, pero también porque creo que aquello a que les invito merece la pena. Hace unos días los invitaba a leer la novela «No miréis al mar». Hoy les recomiendo mi «Diccionariu castellanu-asturianu». Lo edita Trabe y tiene 615 páginas. La obra constituye un notable salto sobre todos los diccionarios anteriores, incluido alguno mío anterior.
La principal aportación del mismo, al margen de su evidente extensión, es la especificación de las acepciones a que corresponden, en una misma entrada, las palabras asturianas que se acogen bajo la misma. Esto es, por ejemplo, a la entrada banco le corresponden: 1) bancu. 2) asientu, banca, bancu, cabiñeru, poyu (de piedra o cementu, corríu delantre la casa), sete (apoyáu na paré), tayón. 3) -de peces. bandáu, báramu, mansíu, xarabal. 4) -de trabajo. cepu.
Que ustedes lo disfruten o que lo disfruten sus amigos y amigas, si ustedes se lo regalan.
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