No sé si ustedes habrán visto lo que ocurre en un gallinero cuando entra el amo con un puñado de maíz para echarlo a les pites: los bípedos plumados se excitan, cacarean, abren sus alas, se pelean por los granos y, sobre todo, acuden con prontitud y alborozo a donde, con la guía de sus lanzamientos, los conduce el amo.
Durante todo el tiempo en que el PSOE ha venido gobernando en la era d. Z., ha estado vigente la llamada “Ley Beckham”, una ley pensada por el PP para que científicos, altos directivos y otros personajes de elite tuvieran en España una fiscalidad reducida, de modo que su tope de cotización en el IRPF fuese el 24%, y no el 43%, como ocurre para el conjunto de los mortales residentes en España. En términos concretos, esa modificación afectaría a unas 200 personas de las alrededor de 2000 que tienen régimen especial por extranjeros residentes temporalmente en España y acogidos a esa normativa, y vendría a suponer entre 80 y 100 millones de euros.
Por otro lado, la nueva reglamentación no se aplicaría a aquellas personas que ya están insertas en ella. En cuanto a su entrada en vigor, hay contradicciones: algunos aseguran que lo haría el 1 de enero de 2010, la ministra Salgado ha dicho que “más allá”. En fin, que ello y otros aspectos está aún por negociar; con grupos minoritarios de las Cortes, por un lado, con los clubes, por otro.
La propuesta, de otra manera, ha suscitado reacciones de todo tipo, muchas de ellas poco apreciables más allá de su consideración como manifestaciones del “genio cómico español”. Se ha llegado a decir, por ejemplo, que tendría sus efectos en el PIB por la disminución de la venta de camisetas fuera de España (“se los juro”, lo he oído con estos pabellones auriculares que la tierra ha de comerse o las llamas han de reducir a polvo) o que la calidad de nuestro fútbol disminuiría. Naturalmente, la reacción más airada ha sido las de los clubes balompédicos, que han amenazado con una huelga.
(A propósito de los clubes, convendría recordar que, a fecha de noviembre del 2008, los susodichos entes debían 627.266.721,38 euros a Hacienda y 4.912.121,35 a la Seguridad Social. He ahí un campo de actuación y ejemplaridad donde el Gobierno podría actuar, tanto para recaudar como para hacer triunfar el reino de la justicia).
De modo que ya lo ven ustedes, ni la “Ley Beckham” ha preocupado nunca al Gobierno, ni los efectos de su corrección van a ser notables en el ámbito económico, ni se restaurará ninguna justicia haciendo pagar más a los que más tienen (entre otras cosas, porque correrán con la subida impositiva las sociedades anónimas deportivas). Y, en otro orden de cosas, es cierto que el impulso inicial de la modificación legislativa no ha partido del PSOE, pero no es menos cierto que los socialistas, con el Ministro de Deportes al frente, han acogido con entusiasmo delirante la idea de “atacar a los ricos y poderosos”, porque ellos sí saben muy bien lo que es arrojar granos de Zea Mays al Gallus gallus de condición ponedora. Son expertos en ello, es de ahí de donde les vienen su crédito social y sus créditos bancarios.
¿Me preguntan mi opinión sobre la cuestión, al margen de su aprovechamiento por los responsables de que se haya mantenido hasta ahora la normativa? Me parece estupendo. Por razones de equidad y justicia. Por los demás futbolistas, en primer lugar. Por tantos millones de españoles que se ven desplumados cada año en sus impuestos hasta dejarlos en piel de gallina.
Pero ya que entramos ahí, ¿por qué no hacerlo en serio? ¿Por qué no prohibir que los deportistas que tienen su residencia fiscal fuera y cotizan fuera participen en los equipos españoles? Si su patria es el dólar o el euro que concurran bajo esas banderas. O bajo bandera pirata. Así, podría reclamarlos Garzón de vez en cuando para impartir justicia.
Me parece que acabo de tener una pésima idea. Si compiten bajo bandera pirata y los trae Garzón a la Audiencia Nacional, a lo peor tenemos que devolverlos después a su país de origen. Reintegrándoles el dinero, sin cobrarles la estancia, pagándoles el regreso y con disculpas (y, tal vez, con reverencias).
Nota: esti artículu apaeció na Nueva España del 19/11/09
1 comentario:
nel esquema xeneral de les coses ... 80 o 100 millones d'euros , pal presupuestu xeneral espanhol ye cosa menor ,,, puxarrina ,,, alpiste ,,,
ye una midia en cualquier casu economicamente irrelevatente y demagoxica destinada a excitar la envidia de los mas fatos pa que apludan a rabiar ,,, eso eso que pague el Ronaldinho ! ... esos que nunca van yos va dar la tiesta pa dicir ,,, hold on a second ,,, que pague mas Ronaldinho ... non a mi eso que mas me da ,,, baxa-yme los impuestos a mi ,,,
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